Whovian Fancomic Library: Forever Janette

Podéis leer la obra comentada aquí y descargarla aquí.

Una ventaja de cualquier fanwork es el poder realizar ciertos crossovers que, de ser más o menos oficiales, se hubieran llevado a cabo tras resolver centenares de problemas acerca de derechos de imagen, sobre los personajes, su ambiente… Por no hablar de posibles negativas o muertes de actores que imposibiliten el llevarlos a cabo. Pero si se es fan y se tiene valor… un crossover es algo más o menos sencillo de llevar a cabo.

En este caso, Rich Morris une los caminos del 8º Doctor y Forever Knight. Serie esta de temática vampírica conocida aquí en España como “El Señor de las Tinieblas”, emitida en las madrugadas de Tele 5 hace años. Para que os hagáis una idea, aquí podéis ver el opening.

La acción comienza cuando… (Aviso, esta es la segunda página del cómic)

(Pulsad en la imagen para verla a tamaño real)

Fijaos en la última viñeta. Espero que reconozcáis esa cabina. Quien la ocupa es, ya lo he mencionado, el 8º Doctor. Sin embargo, este caso, si lo investigan el Doctor y un vampiro es de todo menos normal, os lo aseguro. No quiero decir nada que estropee el disfrute de la historia. Pero si puedo decir que Nick Knight y el Doctor ya se encontraron mucho antes. En la Francia medieval.

¿La Jeanette del título? No lo voy a decir. Se descubre enseguida.

Esta obra demuestra que, cuando un fan es hábil, es capaz de llevar a cabo hazañas narrativas dignas de mención. Como crossover entre las dos series funciona y bien. Cada uno de los dos universos tiene el peso narrativo que hace falta. No el que a uno le gustaría ver. El necesario. Y esto es algo difícil de llevar a cabo. No por la necesaria habilidad. Lo es por la tentación de convertir en megaestrella a un personaje determinado y situarle en acontecimientos que no son los adecuados ni correctos.

Rich Morris no cae en ese error. El único defecto que le puedo achacar a esta historia es su brevedad. Tan solo 57 páginas frente a las más de 200 de The 10 Doctors. Y no es ganas de “más”. De verdad creo que con dos o tres decenas más de páginas la historia hubiera quedado redonda y completa.

Lo único que me queda por decir es que yo la disfruté, por muchos motivos. Como siempre, lo mejor es que juzguéis por vosotros mismos. Pero si puedo deciros una cosa. Merece la pena. Mucho.

¡Nos leemos!

~Usagi~